logo bex mapa
Menu

Adriana Sanz

Se ama y protege, sólo lo que se conoce

En diciembre de 2018 fui a Malvinas, inspirada en las fotografías de Sebastião Salgado sobre los Albatros ceja negra. Ir hasta Malvinas era un proyecto difícil, ya que el solo mencionar su nombre hace que nos invada una profunda sensación de pérdida, tristeza y desesperanza.
No sabía exactamente con qué me iba a encontrar, ya que es poco lo que se conoce sobre la naturaleza de las islas, así que suponía que al llegar vería unas costas similares a las de Chubut. Cuando la avioneta cruzó de Este a Oeste para llevarme al sitio donde iba a fotografiar los albatros, mi sorpresa fue enorme. Un mar turquesa bañaba unas costas rocosas tapizadas de vegetación esteparia, que se intercalaban con playas de arenas blancas. Ya en terreno, todo era naturaleza salvaje, por donde mirara podía ver pingüinos rey, de penacho amarillo, de bincha y magallánicos caminando graciosamente entre madrigueras y bancos de arena. El cielo era sobrevolado por los majestuosos albatros, skuas, matamicos, jotes, petreles y gran variedad de gaviotas y aves playeras. Todo era de una belleza indescriptible.
Esta es una pequeña muestra de nuestras islas, una partecita de lo maravillosas que son, de la riqueza que contienen y de su belleza única. Espero aportar, de alguna manera, a que más de nosotros conozcamos esta otra visión de las Islas Malvinas.
Cuando construyo mis imágenes, intento que las mismas enamoren al espectador, que cuando las vean sientan la necesidad de proteger esa planta, ese animal, ese lugar. Creo firmemente que no se puede cuidar lo que se desconoce y que la verdadera pasión por proteger un espacio y sus habitantes parte del amor que se tenga por ese medio.